Me ofresco a educados no tenemos tabúes

Me ofresco a 25536

Mi nombre es Jordi. No he tenido una vida sencilla. En cuatro palabras precisas: soy tartamudo, tartamudeo, hablo de una manera diferente en relación a cómo lo hace una enorme mayoría de la población. Por lo tanto, os brindo de par en par mi corazón, mi sufrimiento, mis experiencias dolorosas, pero también los elementos positivos —que también ha habido- que me ha aportado la disfluencia. Mi condición de tartamudo, que afecta a miles de personas en nuestro país, me condujo primero a ponerla en marcha y ahora a ampliarla. Ciertamente, la escritura ha sido, durante muchos años, una parte absolutamente vital e indispensable de mi cotidianidad. Escribir es una manera alegre de disfrutar. Y he escrito, en ocasiones, para no desfallecer.